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Salida de observación. 6 de diciembre de 2013. El cometa Lovejoy al atardecer.

El anticiclón continúa manteniendo cielos despejados en la península (y mandando las borrascas al norte de europa y Canarias) y nosotros seguimos disfrutando de noches estrelladas y una atmósfera muy tranquila. A pesar de contar con una luna creciente nos apuntamos a una salida de observación aprovechando los días festivos del puente de la Constitución. Así, la tarde del viernes nos dirigimos una vez más hasta el lugar de observación de Corral de Almaguer.

Llegamos con luz diurna y encontramos ya a algunos compañeros en la explanada. Charlamos un rato y mientras el Sol se ponía comenzamos a montar los telescopios. Ya hacía bastante frío en ese momento y hacían falta varias capas de ropa. Consulté las efemérides del cometa Lovejoy ya que en estas fechas es posible verlo aún al atardecer y apunté mi telescopio hacia esa zona, aún con luz del ocaso. No me costó mucho trabajo encontrarlo ya que se apreciaba claramente como una estrella con nebulosidad a través del visor de la cámara del TS65 con solamente 3 segundos de exposición. Centré el cometa y le saqué algunas fotos a la vez que avisaba a los compañeros para que vinieran a verlo.

A medida que se hacía de noche el cometa era cada vez más y más evidente, pudiendo observarlo con prismáticos incluso. El núcleo y la coma se veían con total nitidez, pero la cola a mí por lo menos se me resistía. Llegamos a apuntarlo con un dobson de 16″ que llevó un compañero pero estaba ya muy bajo sobre el horizonte y además caía por la zona de Madrid, con su enorme contaminación lumínica. No obstante, me dió tiempo a fotografiarlo durante 15 minutos.

Después de observar el cometa alinee el telescopio y a la espera de que Orión subiera por el horizonte decidí hacer tiempo sacando un par de fotos de 10 minutos a M33, la Galaxia del Triángulo. Creo que este objeto será un buen objetivo para futuras salidas. Pero en esta ocasión estaba con intención de fotografiar M42, así que me ceñí a lo establecido y comencé mi sesión de astrofotografía a este objeto. Primero tomas de 20″ para el núcleo, luego de 1 minuto para la nebulosidad principal, 5 minutos y finalmente 10 minutos. Dejé el telescopio y la cámara trabajando, revisando periódicamente el guiado y el correcto funcionamiento del equipo.

Estamos en fechas próximas al máximo de las Gemínidas (el día 14 de diciembre) y la verdad es que vimos varias estrellas fugaces, débiles y muy rápidas pero también vimos un par de bólidos bastante espectaculares (bueno, yo solamente ví uno de ellos, el otro me pilló de espaldas). A parte de eso la noche estaba espectacular, con un cielo de 10, pocas veces hemos podido disfrutar de una atmósfera tan calma y un seeing de tan buena calidad. Hubiera sido un buen día para hacer planetaria, y es que la Luna estaba en una fase creciente deliciosa, y Venus se encontraba en un día de máximo brillo. Juntos ofrecían una delicada conjunción de gran belleza. Más tarde la Luna se ocultó por el horizonte y ya nos quedamos a oscuras, con un cielo espectacular, como pocos días hemos tenido allí. Unos compañeros estaban en Cuenca y otro en Segovia, todos hemos coincidido en que la noche fue especialmente buena.

A través de los telescopios de los compañeros pudimos ver varios objetos. Por ejemplo, la Nebulosa de la Llama a través del dobson de 16″ era espectacular.

Lo malo fue que me dejé olvidados los pantalones de esquí en casa y creo que ha sido una de las noches más frias que recuerdo. Estábamos a -3ºC y de vez en cuando me tenía que meter al coche para entrar en calor. Llevaba botas, dos pares de calcetines, calentadores para los piés, pantalón térmico y pantalones normales, 2 camisas térmicas, forro polar, plumas, braga en el cuello gorro y guantes y aún así tenía frio. Eso hizo sin duda que me recogiera relativamente pronto ya que a eso de las 12 dije basta y nos volvimos para casa. Eso sí, las cintas calentadoras están funcionando perfectamente, que alivio. Estoy a la espera de recibir unos reguladores de potencia y dentro de poco terminaré de hacer los conectores y dejaré ya el sistema final (también tengo pendiente hacerme otras cintas con hilo de nicrom para comparar consumos.
A eso de las 23:00 debajo de Géminis se podía apreciar una nebulosidad muy curiosa a ojo desnudo. Pregunté a algunos compañeros pero ninguno sabíamos qué era. Era de aspecto similar al doble cúmulo de Perseo, consultamos las cartas y se trataba del Cúmulo del Pesebre ¡Realmente espectacular incluso a ojo desnudo! Es una sensación especial cuando ves este tipo de objetos. Me pasó algo similar con el cúmulo de Virgo y realmente eso significa que estás disfrutando de un buen cielo esa noche.

Los próximos días tendremos luna llena y aprovecharemos para ir a las charlas de la agrupación y hacer la cena de Navidad, pero ya estamos deseando disfrutar de una nueva noche de invierno como ésta, eso sí, un poco más abrigados 🙂

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